viernes, 7 de enero de 2011

Diario día V, Reyes y balance del 2010

Hoy ha sido un día realmente aburrido, se podría decir que se ha basado en estudiar, estudiar y estudiar. Ayer día 6 me tomé el día de descanso, estando con mi familia y estrenando todos los regalos de Reyes. Si es que soy como una niña pequeña, este día me hace más ilusión que a Sandra, y eso que la saco 7 años.

Como siempre, soy la primera en despertarme y en llamar al resto para que se levanten a abrir los regalos. Enciendo la luz del amplio salón y me dirijo al árbol de navidad, que se presenta muy verde, casi más verde que cualquiera de las veces que lo haya mirado, alto, y lleno de trémulas luces de diferentes colores. Busco rápidamente mis zapatos, ahí están.

Me sorprendo al ver la cantidad de regalos que me han traído los Reyes Magos, será que este año he sido muy buena. No sé por donde empezar, y sin pensarlo, cojo el primer paquete que encuentro y comienzo a rasgar el liso papel de regalo. Y así hago con todos y cada uno de los regalos, palpando diferentes formas, diferentes texturas. Siempre adivino qué regalo es el de Sandra antes de abrirlo siquiera, porque siempre presenta un rugoso envoltorio. Y esto me gusta aún más, el saber que se ha implicado totalmente en mi regalo y hasta está envuelto por ella misma.

Es un día familiar, y agradable, y al igual que el día de nochevieja, comienzo a hacer en mi mente un balance del último año. Hoy estoy de buen humor, y me apetece escribirlo. ¿Las mejores cosas y peores cosas del 2010? Ahí van...

- Conocer gente nueva siempre es un pro, y más aún lo es cuando alguna de esas personas "nuevas", por su demostración, dedicación e interés, entra a formar parte de tus amigos más íntimos.
- Retomar contacto con viejas amistades que se perdieron porque ya nos vamos haciendo más mayores y cada uno toma su camino.
- El nacimiento de Adrián, mi "sobrino", uniéndose otro miembro más a la familia.

Las peores cosas supongo que han sido:
- El estrés del día a día y la notable reducción del tiempo libre. ¿Y es que, quién ha dicho que hacer 2 carreras a la vez, y trabajar algún que otro fin de semana, es fácil?
- No viajar. Por unas cosas o por otras, este año apenas he salido de Madrid, ¡con lo que me gusta a mí visitar lugares nuevos!, pero si no se ha podido, no se ha podido, esperemos que este año que viene sí...
- Alguna discusión, decepción o malentendido con algunas personas que son importantes para mí.

Y por último, las cosas que me hubiera gustado que sucedieran son:
-Visitar a la prima Lucía a Granada, pues se lo prometí y no lo cumplí.
-Viajar al extranjero como tenía pensado.
-Conseguir reunirnos todas nosotras en verano, y pasar una o dos semanas juntas en la playa.

Pero si de algo estoy segura, es que me alegro de las cosas buenas que han sucedido en el 2
010, que aprenderé de los errores y/o intentaré evitar las cosas malas que han sucedido, y que procuraré hacer por todos los medios, aquellas cosas que quise hacer y no se llevaron a cabo este útimo año, además de añadir nuevas metas, ya que, tan sólo es día 7 de enero del 2011, y aún queda mucho año por recorrer, y muchos objetivos por conseguir...
.

martes, 4 de enero de 2011

Diario día IV

Un año nuevo ha comenzado y han venido con él nuevos cambios. Desde el día "D" me encuentro en shock, porque pese a todos mis esfuerzos, se ha producido el efecto contrario al deseado. Lo peor de todo, es que mi inconsciente ya lo sabía, pero prefería agarrarse al último y más fino hilo de esperanza.

Ahora la realidad se ha despojado de las malas hierbas disfrazadas de buenas y de su carácter variante. Ahora viste de forma diferente, con aires agradables y graciosos, con decisión, con una guerrera azúl, y con una boina y un pantalón del mismo color.

Hoy he quedado con Cris, Patri, Carol y Maribel. Hemos ido a comprar los últimos regalos de Reyes. Una pulsera elegante y ligera, un chándal blanco, y el juego de los Sims para el ordenador, configuran mis últimas adquisiciones para completar los regalos de Reyes de mi familia.

También ha caído algún detallito para mí: unas suaves y calentitas orejeras negras de pelo, y una pulsera con colores chillones. No está de más regalarse algo a una misma de vez en cuando, y más cuando estos últimos días paso más tiempo en esa luminosa y abarrotada sala de estudio que en mi casa. Pero hoy la quedada con ellas en sí, ha sido como un regalo para mí, ya que en esta época de examenes es casi imposible que todas nos pongamos de acuerdo para vernos. Reunirnos todas, charlar, y reirnos mientras nos tomamos unos sabrosos montaditos, y una refrescante cerveza con limón, es un placer indescriptible.
.

sábado, 1 de enero de 2011

Diario día III, sin "a"

Hoy es el primer crepúsculo del dos mil once. En mi silencioso domicilio, hemos comido los restos del exquisito festín que el último número del mes de Diciembre todos ingerimos.

El cielo se exhibe cubierto de nubes y no veo ni un espíritu desde mi dormitorio. En mí, un sentimiento diferente, un sentimiento que desconozco. Nuevos propósitos en mi mente, y con ellos, difíciles decisiones... Enciendo un poco de incienso y respiro el deleitoso olor que desprende. Me siento en el mullido sillón y enciendo el televisor, y sin previo susurro, viene Morfeo.